Tags: actuaciones, cena + copa, cenas de grupo, cócteles
‘Enjoy your soul’ es el reclamo de Bule Bule y es que aquí son el alma y los cinco sentidos los que disfrutan. Si nos decidimos por cenar en este céntrico espacio, cercano a la Gran Vía, encontraremos un viaje por los cinco continentes que ha sido capitaneado por el chef Pepe Roch. Su filosofía cosmopolita se traduce en platos como las Gyozas de gambas al estilo Tom Yam o el Bibimbap coreano. El viaje a Latinoamérica también está asegurado gracias a los Nachos de remolacha con chile y carne, el Taco de Oreja o su versión de la Causa Limeña. Tirando para casa, en la carta de Bule Bule encontramos Vieiras braseadas con bergamota o, si nos vamos hasta el país vecino, Magret de pato ahumado a los cinco tés.
El protagonismo de la barra es también indiscutible y, por ello, la selección de bebidas y cócteles -tanto clásicos como de autor- son otro de los ejes de su carta. En esta sección pueden encontrar desde Mojito Manzanilla hasta un clásico Margarita. El complemento ideal a una buena cena en Bule Bule es el espectáculo de cabaret, seguido de la mejor música, que se interpreta de jueves a sábado en ‘Crazy Mama’. Un intento (sin duda exitoso) de recuperar el espíritu de las auténticas salas de fiestas de antaño. Los miércoles, la fórmula varía ligeramente: en lugar de espectáculo de música y baile, el escenario acoge conciertos tributo a grandes bandas de la historia del pop-rock.
Además, una vez finalizada la cena podrías continuar la fiesta en el bar de copas que se encuentra a pie de calle, donde a lo largo de la noche se suceden improvisaciones del staff -los habituales de Barbara Ann sabes de los que hablamos -y distintas sesiones de djs (a partir de las 01h). Y muy importante: aquí ya no es necesario tener que cenar previamente en el restaurante; todo el que lo desee está invitado a pasar.