‘Los cazadores siempre son invisibles’, la novela policíaca sobre J. F. Kennedy

22 de noviembre de 1963, Dallas, Texas (Estados Unidos). El presidente Jonh F. Kennedy saluda desde su limusina a la multitud que se ha agolpado para arroparle. Son las 12:30 de la mañana (hora local) y en ese momento se oyen tres disparos. Dos de ellos impactan directamente en Kennedy, causándole la muerte. Tras una serie de indagaciones, la Comisión Warren (primera investigación oficial sobre el asesinato) llega a la conclusión de que Lee Harvey Oswald fue el asesino y que actuó solo. Pero automáticamente, salen a la luz múltiples teorías conspiracionistas que desmienten lo sentenciado por esta comisión.

Este magnicidio, el más importante crimen aún sin resolver del S. XX, es el tema principal de la última novela de Julio Holgado, ‘Los cazadores siempre son invisibles’. Con ella, el escritor acerca a sus lectores a este asesinato de manera muy amena y diferente: quien se asome a sus páginas acabará simpatizando tanto con la figura de Kennedy como con la de su homicida. Este hecho hará que broten automáticamente una serie de preguntas en la cabeza del lector: ¿Qué hacer cuando admiras a Kennedy, pero sientes también fascinación por Oswald? ¿Qué motiva a los magnicidas a llevar este tipo de asesinatos? ¿Quizá la inmortalidad? ¿Dejar huella en la Historia?

Una serie de preguntas que son contestadas en el libro a través de una trama policíaca muy bien montada: unas investigaciones sobre los cuatro magnicidios de presidentes ocurridos en la historia de EEUU serán las que vayan respondiendo poco a poco las inquietudes del lector, quien no podrá despegarse de sus páginas. Unas pesquisas que serán llevadas a cabo por unos aficionados y que en un principio se basarán en teorías conspiracionistas, pero que poco a poco, según van obteniendo éxito mediático, les obligarán a arriesgar más. Así, cuando llegan a la figura de Kennedy, ya no habrá vuelta atrás: sus investigaciones les habrán conducido a resultados incómodos y a la aparición de terceros personajes que cambiarán el rumbo de la novela.

Con un ritmo ágil que va in crescendo y que asienta a Julio Holgado como un narrador excepcional, la obra busca revelar al lector que las motivaciones de los magnicidas son siempre las mismas y que en ellas es fácil adivinar la mano de un cazador mayor invisible, que es en última instancia quien sale ganando. Por ello, la lectura de la novela arrastrará al lector a acabar sospechando que, si hubiera estado en la piel de cualquiera de los protagonistas magnicidas quizá, y solo quizá, podría haber actuado del mismo modo.

‘Los cazadores siempre son invisibles’ se presenta así como una novela cargada de intriga e investigaciones, pero también con mucho humor e ironía, que pondrá contra las cuerdas al lector que se atreva a acercarse a ella. Un libro que además está de plena actualidad, ya que hace cuatro meses fueron desclasificados nuevos documentos sobre el asesinato de Kennedy. Aunque aún mantienen otros 200 todavía secretos. ¿Por qué?

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