‘Vega’, comida casera y ecológica

‘Producto ecológico y cocina casera’ reza el cartel de Vega, un bar restaurante junto a la plaza de la Luna en el que la comida se sirve acompañada de mucha filosofía culinaria y conciencia sostenible. Porque además de comer bien, el objetivo que persigue es que sus comensales sean conscientes y responsables de lo que saborean en cada bocado. Y es por eso que solo trabaja con productos frescos, ecológicos, locales y de proximidad.

La cocina que se lleva aquí es una cocina de mercado y de temporada, elaborada según los preceptos de lo casero y lo tradicional. Y aunque éste no es un sitio para veganos, sino para todo aquel que en definitiva quiere comer bien, en su nevera no hay ni carne ni ingredientes que procedan de los animales, como huevos, leche o miel; éstos son sustituidos por otros, como la melaza con la que ‘ligan’ el rebozado de sus croquetas de setas -convertidas en un auténtico must entre sus comensales- y que les confieren una textura que muchos consideran mejor que la convencional.

En laborables cuenta con un variado y económico menú del día, formado por aperitivo, principal y postre, que incluye bebida de la casa: agua o limonada casera. Además de la carta, dividida en diferentes secciones: los aperitivos, a elegir entre opciones como escalivada, pepinos con sambal y cacahuetes o hummus de remolacha. Le siguen las sopas, ensaladas y tapas, como patatas asadas con salsa Vega o carpaccio de tomate de temporada. Y entre los platos principales, muy apropiados para compartir, sandwich casero con vegetales, tomate y ‘queso’ -que no es queso- de almendras, seitán marinado a la brasa y un delicioso curry de verduras estilo thai en poppadoms crujiente. De postre, pera asada o mousse de chocolate, además de tartas y repostería casera para acompañar el café, que también es ecológico.

Ya en el apartado etílico, Vega cuenta con una bodega puramente ecológica: desde el vino y la cerveza, muchas de ellas artesanas y elaboradas en Madrid, hasta los alcoholes para cócteles y combinados, entre los que se encuentran referencias orgánicas y de comercio justo. Porque todo en Vega tiene conciencia sostenible y lugar de procedencia conocido, hasta las mesas y sillas que forman su comedor principal, recuperados por parte de amigos y conocidos y que ahora lucen como nuevos en este restaurante para el que la comida es lo primero.

* Fotos Alfonso Ondarroa