‘Paperboy’, perrito bar de autor
*** ESTABLECIMIENTO CERRADO ***
¿Cuántas tradiciones y nacionalidades caben en un perrito caliente? Si es un hot dog al uso, solo dos: la alemana –porque fueron sus emigrantes quienes tuvieron la genial idea de introducir una salchicha entre dos panes– y la estadounidense –por ser el país que popularizó este bocado hasta el infinito y más allá–. Ahora bien, si se trata de un perrito caliente de los que hace Alfonso Bartone, el creador de Paperboy, tenemos que decir que caben tantas como uno quiera; o tantas como quiera él en este caso, por ser el autor de este perrito bar abierto en uno de los soportales de la calle Orense, 10.
Así es como se entiende la cultura del street food en Venezuela, su país de origen, o en Canadá, donde estuvo viviendo un tiempo. Con un toque de aquí y otro de allá, el resultado es un hot dog de estilo callejero, elaborado a partir de recetas que son una amalgama de ingredientes de diferentes países –hasta la fecha mucho más habituales en una burger gourmet que en un perrito caliente–, como queso brie, cheddar, mozzarella o provolone, cebolla caramelizada, bacon crujiente, jamón serrano, patatas paja, rúcula, salsa de ajo, crema agria, compota de cebolla y miel, guacamole, pesto, chimichurri o ketchup caseros, pico de gallo, chipotle, champiñones salteados, aceitunas negras, cherrys salteados…
Este ‘perritocalentero’ –así denominan popularmente los venezolanos a las personas que preparan los hot dogs– los combina en diez perritos que llevan por nombre las grandes cabeceras de diarios internacionales, como metáfora de los países en los que se inspira para crearlos: en ‘El Nacional’ (Venezuela) se combinan unas patatas paja con salsa de ajo, queso en polvo, repollo y zanahoria; ‘Le Parisien’ (Francia) es algo más refinado, con queso de cabra, rúcula y un toque de mostaza antigua; y ‘The New York Times’ (EEUU), el más popular de la carta, lleva queso cheddar, cebolla caramelizada, salsa barbacoa y salsa editorial, la salsa especial de la casa con mostaza picante y otros ingredientes secretos.
Debajo de esta montaña de sabores se esconde una salchicha a elegir entre Frankfurt, Bratwurst, Chicago (100% ternera), Frikandel (de pollo, al estilo belga), de tofu o la XXL, más de 25 centímetros de salchicha alemana (50% ternera y 50% cerdo). En su cocción, manda la tradición: salchichas cocidas en el momento al baño María y pasadas por la plancha antes de introducirlas entre el pan, hecho con un mollete artesanal que le da un toque especial y que, combinado con el resto de ingredientes, hace que estos perritos no se parezcan a ningún otro. Pero lo realmente sorprendentementbe es que su precio es más que asequible, lo que invita, aún más, a ir a este Paperboy y repetir tantas veces como uno quiera.
Precio perritos: de 3,50 a 5,50€ (con acompañamiento de patatas fritas y salsas caseras).
