Cuando un producto es bueno nos lleva a las alturas, concretamente a las del Hotel INNSiDE by Meliá Madrid Gran Vía (Mesonero Romanos, 13). Ubicado en su séptima planta se encuentra A’OLLO, un restaurante de raíces gallegas que, además de ofrecer una vista maravillosa de la ciudad, invita al comensal a viajar sin límites con sus sabores enxebres (auténticos). El relato de este lugar es muy parecido al de LE TAVERNIER, el rooftop que se encuentra una planta más arriba y con quien comparte orígenes gallegos. La historia narra como un marinero que surca los mares decide volver a su tierra natal y montar una taberna, donde se lleva sus licores y vivencias, además de las sabrosas recetas, que hacen de esta un lugar único.

Inspirado en las cantinas tradicionales de Galicia, el restaurante dispone de 500m2 y dos amplias terrazas que bordean el interior del local. Un lugar perfecto para disfrutar de un ambiente tranquilo, relajado y agradable mientras se saborean todas las exquisiteces de la terra galega, cuya esencia parte de las recetas dictadas “a ollo”. Hace años las recetas que preparaban las abuelas no estaban escritas y se preparaban a ojo, y así pasaban de generación en generación. A’OLLO es por tanto el resultado de la combinación de recetas tradicionales con técnicas vanguardistas, ofreciendo una ‘cocina heredada actual‘. Una fusión de Madrid y Galicia bajo el mismo techo donde la calidad del producto siempre es lo primero.

Como compartir es vivir, la carta del restaurante cuenta con una sección para picar’ xuntos. Las croquetas de A’OLLO es uno de esos platos que no pueden faltar; caseras y muy cremosas, la elección entre pedirlas de jamón ibérico o cigala se vuelve una tarea difícil. También ofrece opciones como las verduras a la brasa, los huevos rotos y el carpaccio de gambas.

Directamente de la’mar llega a la cocina el marisco típico de la región gallega. El marinado de salmón se ha convertido en uno de sus manjares más preciados; con una elaboración de más de 18 horas es perfecto para degustar entre platos. Otras platos galegos que hacen rugir las tripas son los Mejillones de la ría de Lorbé, abiertos con un salteado con escabeche cítrico y kimchi, y  las Vieiras a la gallega, a la plancha  sobre una cucharada de salsa gallega y acompañada de patata trufada y aliño de Módena y kikos en polvo.

A’OLLO también invita al comensal a disfrutar de ‘la tierra, la sección carnívora de la carta. Es imprescindible probar su Costilla de vaca al Josper Josper, cocinada a baja temperatura durante 16 horas, glaseada al josper en un auténtico horno de carbón de los de “toda la vida” y acompañada de patatas guisadas con pimiento rojo asado.

Las encargada de poner la guinda final a la velada es su carta de postres “Dulce Paladar». Para los más golosos destaca su milhoja, un hojaldre de mantequilla con crema pastelera de vainilla montada con nata y chocolate blanco, y la tarta de queso azul Savel. A’OLLO es un viaje al corazón de Galicia del que no queremos volver; por eso puede continuar en su tripulación amiga, LE TAVERNIER, un espacio perfecto donde tomar un cóctel y navegar por el cielo de Madrid con sus increíbles vistas.