Madrid es una ciudad en continua efervescencia y siempre, sea la hora y el día que sea, ofrece un montón de planes de todo tipo. Cuando no estamos trabajando, estamos disfrutando de algunas de las muchas actividades que la ciudad ofrece: bares, restaurantes, teatros, museos, cine… Lo que no todos saben es que en el corazón de la ciudad también hay escondidos algunos espacios que invitan a relajarse y desconectar, a hacer un paréntesis en el acelerado ritmo de vida para poner toda la atención en nuestro bienestar.
Es el caso Sulis Hammam & Spa, un recóndito espacio en el Madrid de los Austrias que bebe de la tradición siria para ofrecernos diferentes experiencias relacionadas con la salud y el bienestar. Sulis combina a la perfección rituales tradicionales de hammam con las terapias de belleza y wellness actuales, consiguiendo que nuestra mente tenga una pequeña escapada del estrés de la vida diaria.
El espacio debe su nombre a la diosa Sulis que, en la mitología romana, era venerada como la diosa de los manantiales que ofrecía curación a través de sus fuentes sagradas a todos aquellos peregrinos que buscaban consuelo. Sulis, cuya escultura podemos encontrar a la entrada del hammam, simboliza la pureza, la curación y el rejuvenecimiento, tres características que se alinean perfectamente con los servicios que ofrece Sulis Hammam & Spa. Este además se inspira en los antiguos baños termales de la cultura árabe donde el agua, el vapor y el calor eran utilizados no solo para la higiene, sino también para proporcionar bienestar físico y mental. A ello contribuye decisivamente la luz tenue, la música y los suaves aromas que se respiran en el hammam.
UN ENTORNO ÚNICO PARA EL RELAX
El interior de Sulis evoca los antiguos palacios orientales, construidos con materiales de gran calidad y riqueza ornamental. El hammam se encuentra en la planta baja y consta de tres piscinas, cuyas temperaturas oscilan entre los 16 y 34 grados centígrados, para disfrutar de toda la experiencia holística del agua. Cada una de ellas tiene una funcionalidad: el baño frío estimula la circulación y tonifica la piel; el baño templado aporta equilibro, y el caliente relaja profundamente los músculos y alivia el estrés. El circuito se completa con un baño turco y una zona de yirns, los tradicionales lavabos árabes.
En esta zona podemos disfrutar también de diferentes tratamientos como masaje con piedras calientes, exfoliación con guante kesse, tratamientos faciales para hidratar y purificar la piel del rostro, etc. De hecho, a la hora de realizar la visita puedes contratar alguno de los paquetes personalizados para hacer más redonda la experiencia. Incluso tienen servicios de estética como manicura o pedicura.
TÉ O BRUNCH EN EL PATIO AL-ANDALUS
El recorrido termina en el Patio Al-Ándalus, una zona de chill out que simula un patio andalusí, donde podrás tomarte uno de sus deliciosos tés, un café o incluso un brunch damasquino, que incluye diferentes platos típicos de la cocina siria. E importante, este patio no es exclusivo para aquellas personas que previamente hayan disfrutado del hammam; aquí son bienvenidas todas las personas que anden buscando un momento de desconexión, pues el tiempo parece detenerse una vez entras por la puerta.
De paso te animamos a visitar su Museo del Jabón, una pequeña sala donde conocerás la historia del jabón y su proceso de elaboración, descubriendo todos sus secretos. Allí podrás adquirir diferentes jabones de elaboración propia así como el famoso jabón de Alepo, una joya con 4.000 años de historia originario de la ciudad de Alepo (actual Siria), conocido por un sinfín de propiedades naturales. Puedes visitar el Museo y tomar un té en el Al-Ándalus por solo 5€.
¿A que no imaginabas que en este rincón de Los Austrias se encontraba un hammam así? Pues guárdate la dirección para cuando tu cuerpo o mente te pidan parar, o simplemente quieras autoregalarte un tratamiento de esos que embellecen el cuerpo y el alma.
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