‘Club Las Encinas de Boadilla’: ocio y deporte en plena naturaleza
Madrid es una ciudad súper completa, de eso no cabe duda. Pero en ocasiones viene bien desconectar de su trepidante ritmo y buscar otro tipo de actividades de ocio que lamentablemente no se pueden realizar en la urbe. Por eso, por muy urbanitas que seamos en el equipo de Madrid Diferente, cada cierto tiempo necesitamos salir al campo y disfrutar de otros muchos placeres que proporciona la naturaleza. Aunque sin irnos muy lejos, pues todo lo que necesitamos lo encontramos a 10 minutos de la capital, en el Club Las Encinas de Boadilla.
En el kilómetro 4.600 de la carretera de Pozuelo a Boadilla, se encuentra este espacio único en Madrid. Con 45 hectáreas en las que poder practicar todo tipo de actividades deportivas, culturales y lúdicas para todo tipo de público, es un referente de modernidad, convivencia, diversión y ocio saludable.
Desde su fundación en 1971, el club ha ido mejorando y ampliando sus instalaciones hasta convertirse en uno de los recintos sociales y deportivos más completos de la Comunidad. De hecho, recientemente se han renovado las pistas de pádel y de tenis, el restaurante El Lago y su terraza con espectaculares vistas y puesta de sol -perfecta para pasar las noches de verano-, y la nueva ludoteca ‘Chospis’ para los peques de la casa.
Piragüismo, vela, hockey y patinaje sobre hielo, golf, hípica, natación, waterpolo, fútbol, esgrima, kárate, judo, yoga, taichi… Si hay algo que nos convence de Las Encinas de Boadilla es su extensa oferta deportiva dirigida tanto al público adulto, como a jóvenes y niños. Con su lago navegable, su amplio espacio fitness -donde se dan clases colectivas como GAP o pilates- y el resto de instalaciones, es imposible resistirse a calzarse las playeras y hacer algo de ejercicio.
Además, la situación inmejorable del club -en medio del encinar de Boadilla del Monte- se antoja perfecta para realizar multitud de planes al aire libre los fines de semana: desde picnics y barbacoas hasta paintball, pasando por cine de verano. Y si lo que preferimos es ejercitar la mente o dejarnos llevar por la música, su programa también incluye actividades culturales como danza, talleres de arte, clases de guitarra, teatro, conciertos…
En Las Encinas también se ha pensado en los más pequeños, y por eso no faltan los cuentacuentos, los cumpleaños tematizados y unas zonas de juegos infantiles, eso sí, muy especiales, como la dedicada al Salvaje Oeste, con una reproducción de un fuerte y cabañas de madera y tipis indios. También son especialistas en el desarrollo de campamentos urbanos, en los que los niños podrán vivir experiencias inolvidables.
Con el Club Las Encinas de Boadilla será imposible aburrirse. Un plan diferente en un espacio a las afueras donde disfrutar con la familia y los amigos del ocio, el deporte y la aventura. En definitiva, todo lo que la ciudad no puede ofrecerte y muy cerca de ella.
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