El Mercado Barceló estrena la temporada estival inaugurando una terraza situada en la azotea de sus instalaciones. A ella se puede acceder tanto desde el interior del propio mercado, como desde la escaleras mecánicas que dan acceso desde la calle al Centro Deportivo Forus Barceló, ubicado en las últimas plantas del mercado. De hecho, la terraza se ha abierto, en gran parte, pensando en los usuarios de ese centro deportivo, con una propuesta gastronómica de lo más healthy. Aunque la terraza ya se aprovechaba desde hacía tiempo –para impartir algunas clases de taichi y yoga al aire libre, por ejemplo, o simplemente para admirar las vistas que hay desde allí–, ha sido ahora cuando se le ha querido dar ese perfil más hostelero, creando un espacio en el que se puede comer y beber desde la mañana hasta la noche.
Este oasis urbano apunta maneras para convertirse en un perfecto refugio durante los calurosos días de verano en la capital, gracias a la vegetación que oxigena y refresca, al mismo tiempo que decora y convierte esta azotea de hormigón en un espacio de lo más acogedor. Arces japoneses, magnolios, granados, bambú… Plantas de múltiples variedades que sirven para crear diferentes ambientes en la terraza: una zona más informal con mesas altas, perfecta para el picoteo; otra zona de restaurante, para aquellos que quieran sentarse a comer o cenar; una zona más reservada, pensada para aquellos que busquen intimidad, y por último, otra con grandes cojines para los que quieran disfrutar de una experiencia de relax total, tumbados bajo las sombrillas. Por la noche, el ambiente se vuelve cálido, gracias a las velas y a la iluminación tenue de las diferentes lámparas repartidas por todo el espacio, convirtiendo la azotea en un lugar muy especial desde el que disfrutar de Madrid y de las vistas de sus tejados. Todo ello ambientado con música chill out, perfecta para tener de fondo mientras charlamos tranquilamente.
La propuesta gastronómica viene definida tanto por la estación del año propia de las terrazas –el verano–, como por la filosofía de comida sana que han tomado directamente del Centro Deportivo con el que comparten instalaciones. Javier Muñoz Calero firma la carta, en la que abundan las ensaladas –de fideos de calabacín amarillo con pesto de kale y hojas de acedera, de tomate con alcaparrón, cebolleta y ventresca, o de judía baby con pecorino trufado, entre otras muchas variedades de lo más completas y apetecibles–, el picoteo sano –dips con pan naan, sopa fría de coco y espárragos, guisantes con guacamole– y la raw food, con diferentes propuestas crudas como el tartar de salmón, ikura, aguacate y plancton, el tataki de atún marinado en vermouth y Jerez, o el carpaccio de ternera, daditos de foie y chutney de mandarina, por citar algunas. Todo muy fresco y sobre todo ligero, para no sufrir con las digestiones cuando la temperatura en Madrid alcanza los 40ºC a la sombra ni sentirse mal después de haber estado horas dándole caña al cuerpo en el gimnasio, y con opciones para vegetarianos y celíacos. Los socios del Centro Deportivo Forus Barceló, por cierto, tienen descuentos para desayunar, comer y cenar en la azotea. Además, hay opción de menú del día para comer entre semana y para los desayunos y meriendas cuentan con bowls de fruta fresca con menta, panes con Omega3, bollería, quesos, embutidos y conservas. En cuanto a la bebida, imprescindible probar sus zumos y smoothies de frutas y verduras, sus frappés de café, chocolate y yogur, y sus cócteles, entre los que destaca el Barcelito, su particular versión del mojito.
La Azotea Forus Barceló ha venido para quedarse y permanecerá abierta durante todo el año, brindando a los madrileños la posibilidad de disfrutar de la ciudad desde este pequeño oasis de salud y relax.
Precio medio 15-20€; menú de 10€ a 12€; cerveza 3€; smoothies 3,50€; copas y cócteles 8€
De lunes a viernes de 10 a 01h, sábados y domingos de 10 a 23h
Tribunal
91 530 17 61