‘Do Design’, una tienda para quedarse a vivir
Café recién hecho, un revistero con publicaciones de moda, una mesa lista para recibir invitados, una alacena llena de vajillas de diseño y un vestidor en el que perderse. Do Design es más que una tienda de decoración, es un espacio en el que apetece quedarse a vivir. Esta tienda de la calle Fernando VI rezuma inspiración nórdica: desde el concepto multidisciplinar del espacio, pasando por la casita de madera diseñada por la arquitecta Mónica Villalba que sirve de mostrador y office, a los productos que ocupan sus mesas y baldas o sus originales probadores que recuerdan a las casetas de las playas cantábricas.
Solo hay dos requisitos para que un objeto entre en Do Design: el primero, que le guste a su propietaria, Lucía Ruiz Rivas, una diseñadora de moda que entiende la tienda como una prolongación de su casa, lo que le da una coherencia y un estilo propio al conjunto. Y el segundo, que los productos sean hechos a mano o artesanales, de pequeños productores y en ediciones limitadas llegadas de todos los rincones del mundo.
En sus estanterías, encontramos cajas de cartón, objetos de escritorio y otras piezas de la danesa HAY, juegos de té y café de vidrio de la japonesa Kinto, telas de la francesa Khadi & Co, o firmas tan especiales como Iris Hankverkt, con una línea de cepillos de todas las clases -desde escobillas para polvo a limpiadores de setas- fabricados por artesanos ciegos en Suecia. También se apoya al producto nacional y a los artistas locales: Do Design vende capazos de una cestera de Cádiz, muebles del diseñador industrial madrileño Juan Ruiz-Rivas o cojines con bordados de la también madrileña Berta Salinas, entre otros. En su showroom de moda encontraremos prendas de hombre y mujer de selectas marcas como Nico & Nico, Christian Wijnants o Henrik Vibskov.
Con su selección de piezas únicas, Do Design ha conseguido no ser solo una tienda donde comprar un regalo de diseño o un artículo de decoración, sino también un lugar por el que pasear buscando inspiración, tomar un té o un café y disfrutar de su espacio cálido y su buena música. También se pueden encargar productos por catálogo o recibir asesoramiento para proyectos de interiorismo.
La otra pasión de Lucía, las artes plásticas, se materializa en su espacio de galería de arte, por donde pasan artistas internacionales dedicados a la ilustración, la fotografía, el collage o la pintura. La programación puede consultarse en su web, aunque lo mejor es pasar por este espacio siempre cambiante e inspirador, y quedarse -aunque sea solo un ratito- a vivir en él.
* Fotografías: Álvaro de la Fuente
