¿Cuál es tu tarta favorita de todas? ¿La de chocolate? ¿Quizás el pastel de zanahoria? ¿Qué nos dices de la lemon pie? Lo que tenemos claro es que la tarta de queso siempre es un acierto asegurado, pero ¿por qué no disfrutar de todos estos sabores juntos? Cheesecake Avenue es el sitio donde la receta de la icónica tarta de queso neoyorquina se fusiona con los mejores sabores de la pastelería americana a través de las técnicas de la repostería moderna.
El comienzo de esta original pastelería se remonta a lo largo de la historia del matrimonio de María Esther Felce y Francisco Urdaneta. Esta pareja de venezolanos decidió hacer de la pasión de María Esther un proyecto de vida, trasladándose a nuestra capital para deleitarnos con este dulce postre. Recetas familiares de más de 50 años, muchísimos libros de cocina a las espaldas y una exhaustiva investigación propia han dado lugar a recetas únicas de lo más estudiadas y personales.
Porque sí, en este local solo podrás comer cheesecake, ¡pero no solo una! A diferencia de la tarta de queso que hacemos en España, en EEUU no tienen como protagonista el sugerente sabor del queso, sino más bien la textura. La base de la cheesecake estadounidense es el suave queso crema. El sutil sabor de este queso permite que absorba sin esconder el gusto del resto de ingredientes, dándole la libertad necesaria a María Esther de poder experimentar en su obrador, lo que acabó desembocando en otras 9 deliciosas recetas diferentes más una sin gluten (para aquellos intolerantes, pero no asegurada para celiacos).
VARIEDAD DE TARTAS QUE COMPARTEN TEXTURA
Una decena de tartas únicas, bautizadas con guiños a canciones y frases célebres de la Gran Manzana, de las que cada persona tiene su favorita. La más demandada es la más clásica de todas: New York, New York, con base de galleta crujiente y topping de crema batida, que puede ser acompañada con mermelada de fresa. Aunque si la fresa es tu debilidad, debes probar la Manhattan Pleasure, elaborada con crema fría de Cava, mousse de fresa y base de bizcocho del mismo sabor. Siguiendo con las frutas, nos pasamos al cítrico con Limonway, el mix perfecto con otro clásico americano, la lemon pie.
De un icono a otro, no te puedes perder The Big Carrot, un dulce bizcocho de zanahoria acompañado con crema fría de cheesecake. Y su vas buscando sabores originales, te recomendamos fervientemente la sorprendente Pistacho Of Liberty, donde el matcha y la mousse de pistacho son los protagonistas. Si buscas los sabores mas chocolateados y golosos podrás elegir entre The Nutella Art Piece, la Cookiefeller, I Love Dulce de Leche o Red Velvet State of Mind.
Si decantarte solo por una se te hace bola, llama a un par de amigos y trasladaros a la gran ciudad con un surtido de las pequeñas tartas degustación. Pero tranquilo, no iréis a la parte ruidosa y transitada de Nueva York, pues la cafetería está diseñada para trasladar al visitante a una experiencia relajada, perfecta para desconectar con un café del tostador barcelonés NOMAD, de grano selecto y cuidado, o un té de Sans&Sans. Aunque los dueños pretenden ir variando según la estación, tanto con las bebidas como con la variedad de tartas, para siempre ofrecer lo mejor sin aburrir al visitante. No obstante, si ya tienes tu favorita, también puedes pedirla en su versión grande de 18 centímetros de diámetro (perfecta para soplar velas).
No se pueden hacer reservas en el pequeño local, pero siempre podrás recurrir al take away. Además, no tardaremos mucho en ver más locales por la ciudad debido al éxito que en el poco tiempo que lleva abierto ha demostrado su proyecto. Y es que ¿a quién no le apetece una buena cheesecake americana de vez en cuando?