Cuando somos niños siempre soñamos con hacernos mayores. Pero, a medida que avanzamos en edad y nos enfrentamos a las responsabilidades y los desafíos de la vida adulta empezamos a sentir anhelo por aquellos años marcados por los juegos y la despreocupación. La infancia, con su inocencia, curiosidad ilimitada y sensación de maravilla, se convierte en un refugio al que deseamos regresar de vez en cuando. Precisamente, esa es una de las razones del éxito de Secretos de Lola, el restaurante de la Cava Baja (Cava Baja, 21) que se ha ganado el corazón de los más nostálgicos gracias a su decoración inspirada en los dibujos animados de nuestra niñez y una oferta gastronómica llena de sabor, en la que se mezclan recetas muy nuestras con otros platos típicos de Italia y Argentina.
La clave para entender este singular cóctel nos la da Patricia Pereira, argentina residente en Madrid desde hace décadas, que ha recuperado parte de las recetas de su abuela materna, Lola, que era española; y otros platos que aprendió de su familia paterna, de origen italiano. Sus abuelos, por ambas partes, se dedicaban a la hostelería. Lola es también el nombre de su hija, a la que ha contagiado el amor por el coleccionismo de estos universos animados. De hecho, es muy probable que si coincides con Patricia cuando vayas al restaurante la encuentres vestida como alguno de sus personajes favoritos. Cuando estuvimos nosotros por allí lucía un divertido vestido de Alicia en el País de las Maravillas.
COCINA CASERA EN UNA CASA DE CUENTO
Aunque ya su fachada nos anticipe que vamos a entrar en una «casa de cuento», lo que vamos a encontrar nada más cruzar la puerta supera cualquier expectativa. Y es que, miremos donde miremos, todo de está lleno de muñecos, peluches y todo tipo objetos relacionadas con el cine y las series de nuestra infancia. Desde peluches de Winnie the Pooh sentados en las mesas hasta personajes de Looney Tunes o Pixar inundando las paredes o colgando de los techos. También hay reproducciones y objetos de los personajes de Alicia en el País de las Maravillas, Pinocho o Barrio Sésamo. Y qué decir de su vajilla, ¡una pasada! En cada mesa, los platos y las copas (pintadas a mano) son diferentes. En ellas vamos a encontrar un montón de personajes míticos de Disney como Mickey Mouse, Simba, Dormilón o Dumbo. Y cómo no, de fondo se suenan las bandas sonoras de todas esas películas memorables como Aladdin o La Bella y La Bestia.
Pero la experiencia en Secretos de Lola va más allá de la decoración. Aquí, los clientes también pueden disfrutar de una exquisita gastronomía de ambos lados del Océano Atlántico con platos típicos españoles, italianos y argentinos, de donde llegan muchos de los ingredientes que utiliza. Las carnes, por ejemplo, son de vacas criadas con pastos naturales en La Pampa argentina. La carta cuenta con entrantes variados, algunos de ellos guiños a películas y series míticas, como ocurre con las Croquetas F.RI.E.N.D.S o los Huevos Rotos Humpty Dumpty. Otro de los imprescindibles para compartir son sus Nachos Caseros con Chile, con los que no podremos evitar chuparnos los dedos como cuando éramos niños. Respecto a los platos principales de su oferta destacan las pastas artesanales, los arroces caseros o sus carnes a la brasa, la mayoría de origen argentino.
POSTRES Y CÓCTELES PARA UN FINAL FELIZ
Como broche de oro a la experiencia, nada mejor que disfrutar de uno de sus postres caseros, como la Cheesecake de dulce de leche o una sofisticada versión de la popular Chocotarta argentina, que os recomendamos acompañar de uno de sus deliciosos cócteles. Para estos han diseñado unas vasijas muy especiales con la colaboración del solicitadísimo José Piñero. Estas, como no podían ser de otra forma, reproducen personajes a los que tenemos especial cariño, como Pitufina, figura en la que se presenta el Pitu Piña colada (mezcla de Blue Curaçao, Malibú, zumo de piña y batido de coco) o el Gin-derrella (trago de ginebra, zumo de piña, zumo de naranja y batido de coco) que llega en una cabeza de Cenicienta.
Te va a costar salir de este mágico sitio. Y cuando lo hagas, solo vas a pensar en volver para reencontrarte de nuevo con todos esos recuerdos y personajes tan queridos. Con Secretos de Lola volver a la infancia ha dejado de ser una utopía. ¿Quién dice que los sueños no se hacen realidad?
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