‘Avocado love’, el templo (vegano) del aguacate en Madrid
Pocos alimentos ponen de acuerdo a tantas personas. El aguacate es uno de esos que gana continuamente fieles seguidores y, curiosamente, apenas tiene detractores. Por eso, cuando Laura Pérez y Mario Martínez decidieron poner en marcha el primer avocado bar de Madrid, lo tenían muy claro: aquí había que servir comida a la altura de las altas expectativas. Y además, añadieron dos requisitos más: cocina vegana y gluten free. Así de compleja es la carta de presentación de Avocado Love, este local con encanto ubicado justo al lado de la siempre concurrida plaza de Juan Pujol, en Malasaña.
Después del éxito de la vecina cafetería Lolina Vintage y el concurrido Vacaciones, los propietarios de Avocado Love comenzaron este proyecto con el aprendizaje de su experiencia, pero también con la presión del éxito corriendo tras ellos. Una estela de éxito ya iniciada en este local hace más de tres décadas, puesto que aquí abrió sus puertas el primer vegetariano de la capital. En esta nueva etapa, Laura y Mario han querido buscar un guiño algo más elegante, ese que no frena una comida con compañeros de trabajo a diario, pero también incita a una cena especial. Para conseguir crear este aura, he aquí un local pequeñito pero tremendamente atractivo.
Una selva tranquila nos recibe nada más cruzar las puertas de madera. Ese clima tropical se consigue gracias al papel pintado con motivos vegetales que cubre toda la pared. Además, la madera de las mesas y el mimbre de las sillas y de las espectaculares lámparas que presiden el espacio también generan esta sensación. Otro de los detalles que más llama la atención de su decoración es su techo de cristal que no solo da mayor amplitud, sino que además potencia la luminosidad que, ya de por sí, tiene el propio establecimiento. Y claro, en un local con tanto encanto, nuestras ganas de que los platos de aguacate, gluten free y veganos empiecen a desfilar por la mesa es notable.
¡¡TODO AL AGUACATE!!
El reto era potente: una carta vegana que no sólo atraiga a los seguidores de este tipo de alimentación, sino que además pueda apetecer a esos amigos que acompañan. Un primer punto a favor ha sido introducir el aguacate en todos sus platos. El otro confeccionar un menú con un puntito original y varios giros inesperados. Un guiño a la cocina mediterránea de toda la vida pero con el toque chic, con ingredientes viajeros, súper alimentos y un rollo modernete (del bueno).
Así comenzamos este banquete saludable con el Guacamole con aire de cilantro y clorella acompañado de totopos de maíz. Se trata de una receta clásica pero con una buena dosis cítrica y con el añadido del aire de cilantro que le da un toque gourmet a esta receta. Seguimos dippeando con su Hummus de aguacate y berenjena en tempura al Agave, un mítico de Oriente con un toque de espirulina azul y aguacate servido con las berenjenas en tempura. Aquí, además del sabor y el contraste de texturas, nos sorprende un hummus turquesa que encanta a la vista, además de al paladar.
Para continuar, podemos decidirnos por un plato fresco y ligero, ideal para la temporada estival: la Ensalada Thailandesa de vermicelli que lleva fideos de arroz en dos texturas, tofu, pasas, tahine, leche de coco, menta, frutos secos, cebolla roja, apio, alga wakame, tomate y zumo de lima. También en frío preparan los Maki rolls de aguacate y brócoli enrollados en alga Nori, relleno de aguacate, crema agria de anacardo y veganesa de wasabi.
Si pasamos a los principales calientes, es un gustazo probar el Canelón de calabacín trufado, relleno de ricota de anacardo trufada sobre cremoso de aguacate. Muy suave y con esta versión de la ricotta que realmente se parece a la auténtica. Después de este plato llega a la mesa el Ssam thailandes de heura y pico de gallo, un cogollo de lechuga, heura glaseada en Umami de cebolla, crudités cítricos, veganesa de aguacate y hierbas aromáticas y, a modo de broche de oro, nos sorprende el Avocado Grill ahumado al Jack Daniel’s, un aguacate relleno de boloñesa de soja texturizada, pétalos de cebolla encurtidos en remolacha y glaseado en crema de coco. Se ahúma frente a nosotros y ese sabor se queda bien impregnado en el aguacate.
El broche dulce no decepciona en absoluto y además sorprende porque se trata de un Falso twister de chocolate blanco, lima y aguacate que imita a este popular helado y del que sorprende especialmente la autenticidad del choco blanco (receta propia hecha a base de leches vegetales). Todos estos platos forman parte del menú degustación para dos personas que ofrecen en horario de comida o cena en Avocado Love y que es una oportunidad única para dejarnos deleitar por la mayor parte de platos de su carta.
Y así, con este buen sabor de boca nos vamos y confirmamos que el primer avocado bar de Madrid crea adicción y nos engancha, más si cabe, al bendito aguacate.
EL IMPRESCINDIBLE es su Avocado Grill ahumado al Jack Daniel’s, una receta muy especial en la que comemos el aguacate cocinado y ahumado… ¡Toda una experiencia gastro!
FÍJATE EN… Cualquier rincón del local es fotogénico pero especialmente los espejos del techo que, a buen seguro, harán de él uno de los restaurantes más fotografiados de la ciudad.
*Fotos: Paco Montanet / Alfonso Ondarroa
