Semillas de cannabis: Un producto legal de tendencia
Las semillas de cannabis se consideran un superalimento y se publicitan progresivamente de forma transparente. La razón es justificable, pues según la perspectiva legal, la industria de los cultivos de estas semillas es una empresa excepcionalmente famosa en estos días, especialmente entre los países donde no incluye cuestiones legítimas, por lo que su adquisición en tienda online como Sensoryseeds no acarrea compromisos legales. Evidentemente, hay que subrayar que el desarrollo es legítimo siempre y cuando su propósito no se centre en la comercialización ilegal de la planta y sus partes. El mejor supuesto para los productores es tener la opción de ajustarse a la legalidad mientras compran semillas para su uso coleccionable.
Trascendencia de las semillas de marihuana en la actualidad
Las semillas de marihuana se han convertido en uno de los principales recursos en la industria alimentaria, y obviamente, tienen una afortunada ventaja médica en contraposición a otros productos de consumo humano. De entrada, sus grasas insaturadas contribuyen con el metabolismo de las grasas favoreciendo el funcionamiento de sistemas imperantes como el cardiovascular. Hay un par de procedimientos para consumir las semillas de marihuana; en el caso de que las prefieras aplastadas o molidas, también es posible integrarlas en batidos, cremas, postres, yogur y más. De igual forma, se pueden comer como aperitivos, ya sea crudas o cocidas a fuego lento.
Sin embargo, un detalle importante es que las semillas de cannabis no son todas iguales. Y es que, la información sobre su evolución nos permite rastrear tres órdenes principales: Se podría decir que son las precursoras del resto de semillas. Son semillas esencialmente. En primer lugar, las semillas regulares, que se caracterizan porque en su desarrollo no ha intervenido la mano del hombre, por lo que no se ha modificado su genética y dan paso a plantas masculinas y femeninas. Por su parte, las semillas feminizadas surgen al polinizar las flores de una planta femenina con el polvo aislado de otra planta femenina que ha sido expuesta recientemente a una proceso de «inversión». Esto quiere decir que la planta femenina es cambiada hereditariamente en un macho con la condición de que no ofrece ninguna cualidad masculina. Por último, las semillas autoflorecientes que se han convertido en el número 1 de las personas que se inician en el desarrollo de las semillas de cannabis, ya que son semillas que ofrecen plantas seguras sin muchas solicitudes sobre el fotoperíodo, además de llegar a una floración muy rápida.
¿Cómo se logra la legalidad de las semillas de marihuana?
La comercialización de semillas de marihuana es legítima en España y en el resto de Europa sólo para el stock de recolectores y no para hacer cosechas de nuevas plantas. Esto se debe a que las semillas expuestas por los enormes bancos de semillas consideran el máximo legal de THC o tetrahidrocannabinol, que no debe superar el 0,2%; posteriormente, las personas que decidan hacer crecer estas semillas obtendrán plantas ricas en THC, por lo que se impide la comercialización de estas plantas. Si la cosecha es privada y en un espacio particular que no repercuta en el resto de la población en general, es posible no enfrentarse a la ley. Por ejemplo, en el Reino Unido, es posible comerciar, vender o comprar semillas a nivel local y mundial, pero la germinación sigue siendo ilegal. En Italia y Francia, debido a la gran cantidad de tiendas de este tipo, estos ejemplares son legítimos, sin embargo su germinación es ilegal; en Alemania, las semillas no están contempladas por la ley, por lo que su obtención es legal, pero este país ha prohibido la publicidad de semillas en todo su territorio. No obstante, debido a las normas mundiales, es posible enviar semillas de otro país a Alemania.
Lo que hacen estas semillas a la salud
Las semillas de marihuana han sido consideradas desde el punto de vista del bienestar como un alimento fuerte y un importante activo natural que seguramente podría formar parte de la vida diaria. El sistema inmunitario y la piel se benefician de la utilización de las semillas de marihuana, dan un sorprendente manantial de apoyo celular, son igualmente ricos en Omega 3 y 6 que se erigen como cardioprotectores y activadores de respuestas inmunitarias. Además, la presencia de minerales, suplementos y fibra regular igualmente hacen vida en las pequeñas semillas de la planta, por tanto resultan un recurso natural preferible sobre el aceite de pescado o la chía. A nivel proteico, su valor es equivalente al de la proteína animal, ya que permite que el cuerpo obtenga los aminoácidos indispensables que no puede lograr por sí solo; y asumiendo que estamos hablando de proteínas vegetales, su responsabilidad es más notable que la de la soja. Obviamente, la planta de marihuana aporta mucho, y las semillas son una prueba sólida de sus ventajas, y lo mejor es que se han convertido en un producto comercial legal.
