Un salón de juegos, con billar y mesas para jugar al póquer, una barbería, un ring de boxeo, un elegante salón para tomar copas… Una antigua nave del Museo del Ferrocarril se convirtió por una sola noche en un exclusivo club clandestino para hombres de los años 30. Un espacio selecto y masculino, muy acorde con el espíritu del MINI Paceman, el nuevo modelo de MINI que fue presentado en Madrid con un espectacular evento que también incluyó un combate de boxeo en vivo, música dixieland con la banda No Reply y una DJ session a cargo de Bimba Bosé, que se ocupó de animar velada con una ecléctica y muy especial selección de música.
El acceso a la sala por la puerta principal era permitido solo a los caballeros que indicaran la contraseña correcta (‘Usted Primero’), aunque algunas mujeres consiguieron entrar al club por una entrada oculta en la barbería donde disponían del atrezzo necesario para caracterizarse como gentlemen. Todos ellos tuvieron la oportunidad de subir y comprobar las cualidades de los dos MINI Paceman en el que hicieron entrada los dos boxeadores que posteriormente se enfrentaron en el cuadrilátero.
Fue una noche de lujo, con juegos, música, bailes, copas… Por unas horas olvidamos que estábamos en la época de la Ley Seca, hasta que llegada la medianoche dos policías irrumpieron en la sala y, de muy malos modos, nos obligaron en desalojarla, poniendo fin al clandestino, y ya mítico, Mini Paceman Club.