Harina, agua y sal. Estos son los tres ingredientes que se necesitan para preparar la masa de los wrap más típicos de Beirut. Los Saj wrap -que así se llaman estos rollitos libaneses- se venden por decenas en Makan, un pequeño espacio especializado en comida del país mediterráneo. Y, aunque su carta cuenta con alguna receta más, lo cierto es que son estos ‘burritos a la libanesa’ los auténticos protagonistas de su oferta, con hasta una decena de variedades a las que se les pueden ir añadiendo diferentes ingredientes en función de los gustos del comensal.
Tal y como relata Alex Mtaini, el joven libanés que regenta este pequeño local, ésta es una de las comidas típicas del street food del país árabe. De hecho, el primero que hay en su carta, el de Tomillo, es uno de los tentempié más típicos para los vecinos de Beirut. Su relleno está hecho a base de tomate, pepino, tomillo y menta y esta combinación fresca junto con la ligereza de la masa libanesa, puede ser una gran opción para un almuerzo veraniego. Pero claro, hay opciones algo menos ligeras pero, eso sí, igualmente (o incluso más) sabrosas.
Si hablamos del preferido por la clientela habitual del local de Velázquez, encontramos el de Pollo Sumac, una delicia bien contundente que incluye pechuga de pollo ligeramente especiada (y algo picante), acompañada por ensalada, cebolla caramelizada y salsa de melaza de granada. Además, existe la posibilidad de agregarle hummus que preparan en la cocina de Makan siguiendo la receta original y que convierte este saj wrap en uno de los más jugosos de la carta. Para quien quiera ir más allá y adentrarse más en la cultura de este país oriental, Alex recomienda probar el de Carne al estilo libanés. Una receta que, comenta, es muy común en los desayunos del país y cuyo relleno se conforma con carne picada picante y ensalada.
Y en el extremo opuesto y para obedecer a nuestros gustos golosos, en Makan nos proponen probar su Saj Wrap relleno de Nutella para el momento del postre. Es una receta que nos recuerda a un crepe pero que adquiere un rollito algo diferente y menos dulce gracias a la masa que envuelve todo. Porque sí, aquí también, el secreto está en la masa.