Mom, la ‘reina’ de las ginebras
Pasa el tiempo y los presagios que advierten sobre el fin de la era de los gin tonics van en aumento. De la misma manera que lo hacen las razones para sospechar que el reinado de este combinado todavía tiene un largo recorrido por delante y sus límites -si es que los tiene- aún están por vislumbrar. Aunque las barras de la capital proporcionan datos más que suficientes para sustentar la primera teoría, la irrupción en el mercado de la ginebra MOM aporta nueva razones para creer que su número de fieles, lejos de decrecer, irá en ascenso.
Se trata de una nueva distilled gin, original de Reino Unido, que llega a nuestro país de la mano de González Byass. Su estilizado diseño, así como un potente aroma frutal (ha sido infusionada con frutos rojos tras cuatro destilaciones en alambiques de cobre) con leves toques cítricos, explican su irresistible poder de atracción, especialmente entre el público femenino, más predispuesto a las ginebras aromáticas, más suaves y, en este caso, con menos contenido alcohólico (39,5º).
¿La mejor manera de apreciarla? El gin tonic perfect serve recomendado por los expertos: en copa de balón, con tónica Schweppes de jengibre y cardamomo (para aportarles unas ligeras notas especiadas) y una generosa dosis de almíbar de cerezas amarenas (o, en su defecto, de guindas al marrasquino), con el que podremos jugar graduando el color y el nivel de dulzor del combinado. Si lo agitamos adquiere un color rosa y su sabor es más dulce; en reposo, el almíbar se posa en el fondo, evitando interferir en el carácter seco original de la ginebra. Para ayudar a mezclar, un sticker que se presenta sobre la copa con dos cerezas amarenas.
Tras probarlo, todo el mundo coincide en la misma opinión: el reinado de la ginebra va para largo. ¡God save the gin!
