Han pasado 50 años desde su inauguración y la Cafetería HD (Hermanos Díez) sigue tan actual como el primer día. Eso sí, con algunos y notables cambios acometidos por sus nuevos responsables, el Grupo La Musa, que se hicieron con esta antigua cafetería del barrio de Argüelles pocos días después de su cierre. Tal y como pretendían sus ahora propietarios, el local conserva casi por completo su aspecto original de los años 60 (fachada acristalada, una extensa barra de madera con taburetes sujetos al suelo, mesas de aglomerado, sillas de skay…), al que han incorporado otros elementos decorativos de estilo vintage y diseño nórdico, dando lugar a un espacio único que recuerda a los dinners americanos aunque con cierto regusto a bar de barrio. Con ello han posibilitado la integración de sus clientes de siempre, que siguen frecuentando HD para desayunar café con churros o tomar tortitas a la hora de la merienda, con otro nuevo público, más joven, que se acerca hasta aquí atraído por su estética retrochic, así como por su completa y funcional oferta, que abarca desde menú del día, sandwiches o pizzas hasta un sinfín de cervezas (más de 40 tipos, de toda clase y procedencia), cócteles y destilados premium.
La nueva HD mantiene el formato de carta habitual de las cafeterías tradicionales de Madrid (en la memoria, además de Hermanos Díez, Nebraska, California, Manila…), con opciones para cualquier momento del día y sin limitaciones de horarios en la cocina. En ella figuran todos los platos de antes, aunque versionados: croquetas caseras (de langostinos o pollo), salmorejo (con jamón, huevo, queso fresco y cerezas), perritos (con guacamole y salsa remolada), pepito de ternera (con pan de mollete y queso cheddar)… Más algún plato de pasta, pescado (salmón o pez mantequilla) y carne (entrecôte de buey).
Las hamburguesas, en principio, solo eran una opción más de este extenso listado, pero su excelente calidad y las genuinas recetas empleadas en cada una de sus variedades, las han convertido en el plato estrella de la casa, razón por la que HD se ha hecho popular en toda la ciudad. Todas ellas comparten una misma base: 150grs. de carne de buey con pan artesanal de cerveza. A partir de ahí, diferentes posibilidades en función de si la prefieres más clásica (Grandburger, con crujiente de cheddar, cebolla y bacon) o darle algún sabor internacional; en este caso, la francesa (nuestra favorita, con foie mi-cuit, cebolla y manzana caramelizada) o la italiana (rúcula, guacamole, chipotte-mayo y mozzarella), nunca fallan. Para acompañarlas, patatas fritas caseras o yuca frita.
El menú perfecto se completa con unos nachos (en tortitas) con guacamole y un espectacular gofre con helado de vainilla, dulce de leche y nueces (siempre para compartir, imposible enfrentarse a él uno solo). Buen sabor de boca que se prolonga también en la cuenta. Una cena a la carta por menos de 15€ por persona parecía territorio exclusivo de los fast foods y las franquicias. Y teniendo en cuenta la agilidad y simpatía del servicio, mucho más mérito.