Conocemos el mundo a través de nuestros cuerpos, solo así podemos conectar con el exterior. A partir de esta premisa tan sencilla la creadora multidisciplinar Marina Núñez articula su obra. En ella destacan los cuerpos, normalmente anómalos y metamórficos, alejados de lo que podríamos calificar como normal, pero es precisamente a través de ellos como podemos acceder a la realidad. La palentina ha realizado esta experiencia en distintos formatos y disciplinas en sus 30 años de carrera, pero manteniendo siempre esa conexión entre lo corpóreo y lo incorpóreo.
En la exposición Nada es tan profundo como la piel, que ahora puede verse en el Museo Lázaro Galdiano, la artista ha apostado por una experiencia inmersiva y multisensorial que reúne esculturas, vídeos, imágenes y dibujos. Sin embargo, la particularidad de estas piezas es que están generadas con tecnología software 3D y, por supuesto, con la herramienta de moda, la IA. Las creaciones sirven como metáforas visuales, pues, aunque la artista siempre se ha decantado por hablar de lo femenino, en esta ocasión lo hace con representaciones atípicas.
La muestra funciona como un site-specific art (‘arte en un sitio específico’) que se extiende por varias salas, logrando que las propias estancias del museo formen parte de la obra. Aprovecha cada espacio para dotarlo de una personalidad única dentro de la exposición, de manera que la experiencia entre una y otra zona sea distinta, pero integradas todas dentro del marco creativo de Núñez.
Nada es tan profundo como la piel podrá verse en las Salas 7, 9, 11, 17, salón de baile y Pórtico del Museo Lázaro Galdiano (Calle Serrano, 122) hasta el domingo 10 de marzo. La entrada para la expo es la misma que se necesita para acceder al museo (7 €). Además, los M-D 14-15h y J 16:30-19:30h la entrada es gratuita.