El Instituto Europeo di Design ha creado en su interior un snack-bar de diseño, obra del arquitecto Lucas Galán Lubascher, que aspira a convertirse en punto de encuentro de estudiantes y profesionales del mundo de la cultura, el diseño y la comunicación. Es el Bombay Sapphire Room, un pequeño y vanguardista espacio que trae consigo una (deseada) terraza al patio del centro y que quiere ser también un espacio abierto a todos; al público asistente a las exposiciones y actividades organizadas por el IED, y a todos aquellos que simplemente deseen desconectar del bullicio de la ciudad en un entorno excepcional.
Estamos en el patio central del Instituto, demarcado por el Palacio de Altamira, una construcción del S. XVII realizada por el arquitecto Ventura Rodríguez y, por otra parte, la fachada interior de un castizo edificio de viviendas (con sus tendederos al descubierto incluidos). Al pertenecer a un centro docente y no tener cocina, la oferta es más bien básica (refrescos, café, cerveza sin alcohol, bocadillos, sandwiches y ensaladas, a precios para estudiantes), pero la tranquilidad y la sombra están aseguradas a cualquier hora del día. Eso sí, sólo hasta las 19h, porque -lamentablemente- la terraza cierra cuando finaliza la actividad en sus aulas.
Además de las habituales exposiciones de diseño y arte, el centro permite a los visitantes asistir a las conferencias y eventos que se estén celebrando en ese momento. Así que recuerda siempre antes de entrar consultar la programación prevista para ese día.
*fotos: Alfonso Ondarroa