Situado en el barrio de Huertas, el Jazz Bar es un rincón ideal para los incondicionales del jazz y de la conversación. Con más de treinta años de existencia, nos ofrece una selección impecable de los grandes clásicos del jazz a través de su hilo musical . La calidad de la acústica y la especialización de su música es una prioridad en este local, teniendo en sus archivos joyas que van desde DVDs de conciertos cuidadosamente elegidos hasta entrañables vinilos con su característico sonido añejo. Este ambiente , acompañado de una inteligente distribución del espacio en forma de reservados que favorece la intimidad, lo convierte en el sitio perfecto para largas charlas, reuniones de amigos y primeras citas. Su amplio horario y disponibilidad permite acercarse a disfrutar de la sobremesa, relajarse en el after work y saborear la noche.
En el Jazz Bar no cuentan con una carta al uso. El trato personalizado al cliente y las recomendaciones de los camareros es una de sus máximas, lo que convierte cada visita al lugar en una experiencia única y excitante. De primeras, se nos ofrece cafés y cócteles, aunque sus especialidades son el café irlandés (preparado con nata de pastelería y mucho mimo) y los gin tonics, para los que puedes elegir entre treinta marcas, distintas tónicas y especias (atención a sus ‘gin tonic de la semana’). También se puede comprobar la creatividad de sus barman en los cócteles clásicos, como el Tom Collins y el Gin Fizz, los más solicitados por sus habituales.
Un valor añadido en verano es que se puede disfrutar de su terraza, en una zona muy poco transitada por el tráfico, donde se pueden degustar sus excepcionales mojitos, cóctel reservado exclusivamente para la época estival.