En los últimos años, una nueva «movida madrileña» ha despertado en la zona de extrarradio de la capital, que está viviendo en sus calles la capacidad transformadora del arte. Lo vemos cada día en Carabanchel que en los últimos años ha pasado a convertirse en foco de movimientos creativos gracias a la cantidad de jóvenes artistas que se han mudado al barrio para poder abrir sus propios talleres y poder desarrollar así su obra. Es lo que ha llevado a muchos a hablar de Carabanchel como «el nuevo Soho madrileño».
Las antiguas naves industriales que antaño colonizaban el paisaje del barrio han vuelto a cobrar vida gracias a los estudios y galerías de arte que allí se han instalado. Es precisamente en una de las zonas mas industrializadas del distrito, entre talleres de automóviles e imprentas, donde se ubica Galería VETA (Antoñita Jiménez, 39), un espacio que con sus 1.200m2 se he hecho con el título de «la galería de arte más grande de Madrid». Aunque en la calle Antoñita Jiménez únicamente un discreto letrero anuncia que esta antigua imprenta ha cambiado de cometido y solo las intervenciones que famosos grafiteros como Suso33, Aryz, Beto o Andi Rivas en sus inmediaciones ofrecen al viandante alguna pista de las exposiciones de arte que la nave alberga.
VETA aspira a situarse como uno de los centros culturales de referencia en Madrid, aunque entre sus principios fundacionales también está el de acabar con el concepto burgués que, desde tiempos inmemoriales, acompaña al mundo de la pintura en el imaginario colectivo. Tras sus negros portones, bulle el arte de los jóvenes autores emergentes más prometedores que comparten espacio con otros ya consagrados internacionalmente, que suman fuerzas para transformar la escena del arte contemporáneo de Madrid. Alejado de las elegantes galerías que dominan el centro, VETA conserva el adoquinado original, el suelo de cemento -y las grietas del mismo- y salas con techos de cableados y vigas al descubierto que otorgan total protagonismo a la obra, y no a su entorno.
Este sorprendente espacio llega a nuestra ciudad de la mano del reconocido galerista Fer Francés, quien tras trabajar en galerías de renombre como David Zwirner, la XL Gallery (Moscú), Tim Van Laere Gallery (Amberes) y participar en ferias a lo largo y ancho del planeta, regresó a España para fundar la galería Javier López & Fer Francés. Después de alcanzar el éxito y el reconocimiento internacional gracias a una propuesta de lo más transgresora, ha decidido apostar por VETA, un proyecto más personal en el que también hay cabida para otras disciplinas como el cine, la música o la fotografía. La elección del nombre, VETA, hace clara alusión a la esencia, pues Veta es la franja que forma un dibujo en un material y que destaca por ser de diferente tono o de distinta materia. «El comienzo de todo», según Francés.
A través de su web y redes sociales podréis ir conociendo las distintas exposiciones temporales que se sucederán en esta sala llamada a convertir Carabanchel en la nueva meca del arte contemporáneo.