‘La Caja Lista’, el teatro como nunca lo has vivido
En el teatro ya hemos visto prácticamente de todo, y en muchas ocasiones uno se queda con la sensación de que está todo inventado y es muy difícil sorprender al espectador. A veces no vale con una mega producción, sonido envolvente o pirotecnia desmedida; a veces falta algo que no sabemos explicar, pero hace que no nos impliquemos al 100% con el espectáculo que estamos viendo. Con esta idea como punto de partida, La Caja Lista ha decidido coger el toro por los cuernos e innovar en este arte milenario de la dramaturgia: han desarrollado obras de teatro interactivo donde la inmersión del público es total.
En un local situado por la zona de Acacias (Arganzuela), un grupo de apasionados por el teatro ha encontrado su base de operaciones. La pequeña sala está distribuida en dos pisos: en la parte superior se encuentra un coqueto bar donde poder tomar una cerveza o un refresco antes de que comience la representación, que tendrá lugar en la sala inferior. Además, mientras disfrutamos de este refrigerio, nos explicarán cómo funciona el espectáculo y cuál es la mecánica de participación.
Los responsables de este teatro, con Javier Posadas al frente de la dirección y el guion de los espectáculos y Víctor Linuesa como director creativo, han decidido distanciarse del resto de ofertas de ocio de Madrid creando piezas que no habíamos visto hasta ahora. Defensores de que hay otras formas de contar -y vivir- las historias, son cuatro obras las que tienen en cartelera hasta el momento, aunque trabajan continuamente en el desarrollo de nuevas propuestas.
MÉTETE DENTRO DE LA OBRA
Sus dos piezas más populares guardan un punto en común: el público aborda el escenario para interactuar con los actores y llegar a las conclusiones pertinentes. Por ejemplo, ‘Cluedo 1910’ lleva a acción real el mítico juego de mesa, ambientando la acción a principios del S. XX con un misterioso asesinato por descubrir. Al igual que en el Cluedo tradicional, deberemos averiguar quién ha sido el homicida, cuál ha sido el arma y en qué estancia ha tenido lugar; la peculiaridad es que aquí tendremos que hablar con los actores para conseguir información y descubrir el misterio. Lo mismo ocurre en ‘El sótano del psiquiátrico’, aunque aquí en vez de interactuar con personajes sacados de otra época, tendremos que hacerlo con internos en un centro de salud mental.
Pero sin duda, su espectáculo más revolucionario es ‘Protocolo Eliminación’. En esta obra, más allá de la interacción con los personajes -que en realidad en ningún momento llega a ocurrir como tal-, el público tiene en sus manos el destino de los mismos. Como si de un juego de ‘elige tu propia aventura’ se tratase, serán los presentes quienes decidan cómo continúa la historia, y sentenciarán el destino de los personajes en escena.
ELIGE CÓMO TERMINA LA OBRA
Situémonos: ‘Protocolo Eliminación’ nos habla de un futuro no muy lejano en el que el Gobierno ha impuesto un sistema de validación social, en el que cada ciudadano puede puntuar a otro en una escala del 1 al 5 dependiendo de la opinión que tenga de éste. Bajo estos criterios, las personas con una puntuación de 2,1 o menos, son susceptibles de acudir al Protocolo de Eliminación. Cinco personas serán elegidas y encerradas en una habitación, y solo una podrá salir viva: los cinco tendrán que ir poniéndose de acuerdo para elegir quién muere y quién vive. ¿Y qué ocurre si no se ponen de acuerdo? Que entonces, será el público quien decida quién muere a continuación.
En determinados momentos de la representación, una voz indicará al público que elija quién debe ser ejecutado en el escenario, con una votación realizada a mano alzada. Lo más interesante de esta propuesta es que entre los mismos espectadores surgen interesantes debates sobre por qué alguien debe ser eliminado o por qué no, ayudando a los indecisos a decantarse por algún candidato. Gracias además a la ambientación de esta pequeña sala -con capacidad para unas 40 personas-, la tensión por momentos hará que los sentimientos de todos los presentes estén a flor de piel y se desborden. Gran parte de la culpa, por supuesto, también la tienen los actores: encerrados con desconocidos en una habitación, son capaces de ejemplificar perfectamente conceptos como los prejuicios, el espíritu de supervivencia, la codicia, la rabia, el cariño o el respeto.
Sin duda, La Caja Lista ha llegado a la ciudad para revolucionar el concepto de teatro, y permitirte vivir una experiencia completamente diferente. Y si eres de esos vergonzosos que temen participar o interactuar, no te preocupes; como bien dice Javier Posadas, La Caja Lista ha hecho teatro interactivo para que quien quiera participar lo haga al 100%, pero también para todos aquellos que simplemente quieren vivir una velada de lo más original.
